Cirugía de Párpados

La Blefaroplastia puede corregir los párpados superiores caídos y las bolsas de los párpados inferiores, que hacen ver a las personas mayores y más cansadas de lo que realmente están.

El exceso de piel de los párpados superiores ocasionalmente interfiere  con la visión.

El fin de esta intervención quirúrgica es eliminar el exceso de piel y «bolsas» de los párpados, lo que le da un aire más fresco a la mirada y un aspecto «joven» a los ojos; e incluso puede mejorar la visión en las personas mayores que presentan un exceso importante de piel del párpado superior que cae sobre el ojo.

La Cirugía de Párpados o Blefaroplastia, como procedimiento aislado, no elimina las «patas de gallina» u otras arrugas de la cara , ni tampoco levanta las cejas caídas. Para mejorar estos problemas se requiere de otras técnicas adicionales, que se pueden realizar, en la mayoría de los casos, en el mismo tiempo quirúrgico.

Los resultados de esta intervención son muy satisfactorios y duraderos. En la inmensa mayoría de los pacientes, las bolsas de los párpados no vuelven a aparecer.

Se realiza normalmente, tanto la Blefaroplastia como las técnicas acompañantes, con anestesia local y una sedación suave, para minimizar la ansiedad del paciente.

En algunos casos, cuando en un mismo tiempo quirúrgico se realiza la blefaroplastia y estiramiento de las arrugas faciales (Lifting facial), se puede llevar a cabo con anestesia general y un corto tiempo de estancia en la clínica.

Hay dos tipos de incisiones posibles en la Cirugía de Párpados o Blefaroplastia:

1. Una incisión cutánea  en el pliegue del párpado superior, acompañada de otra incisión cutánea en la línea de las pestañas del párpado inferior. Es la Blefaroplastia clásica, y se realiza más en mujeres y en pacientes con sobrante importante de piel del párpado inferior.

2. La misma incisión cutánea en el párpado superior, pero un abordaje en la conjuntiva para las «bolsas» del párpado inferior, sin incisión en la piel del párpado inferior. Es el tratamiento de elección en el hombre, y en los pacientes con poco sobrante cutáneo de párpado inferior. Es la Blefaroplastia transconjuntival.

Una vez extraída la grasa y piel sobrante de los párpados, nos quedan unas mínimas cicatrices que suelen ser invisibles al cabo de 3 meses, pudiendo ser disimuladas mediante un discreto maquillaje durante este tiempo.

El dolor posoperatorio de la Cirugía de Párpados es mínimo, requiere de la formulación un analgésico suave.

Los puntos de sutura se retiran a los 6 o 7 días, quedando en este momento una pequeña equimosis o morado en la parte inferior de los párpados. La piel necesita, a partir de este momento, de una hidratación intensa para recobrar su tono normal; y en los casos de exposición solar un filtro de protección. El resultado final se consigue a los tres meses, debiendo seguir controles posoperatorios durante este tiempo.

La Blefaroplastia es una intervención sin hospitalización, requiriendo una incapacidad laboral mínima de 24 horas. En los casos de personas que trabajan de cara al público, se puede requerir, por los moretones, una incapacidad más prolongada de 5 a 8 días.